FAQs del Área Clínica de Anestesia, Reanimación y Bloque Quirúrgico

FAQS

Voy a operarme mañana y no sé qué comer

La noche anterior a la intervención realice una cena ligera (carne a la plancha, pescado, tortilla), despues guarde ayuno absoluto (sin comer, ni beber) al menos 8 horas antes de acudir al Hospital: desde la noche previa a la cirugía (24.00h): si se opera por la mañana, desde las 7.00h (desayuno ligero) si se opera por la tarde.

Si tiene que tomar medicación por la mañana, DEBERÁ TOMAR LA QUE LE INDIQUE EL MÉDICO ANESTESISTA y puede hacerlo con un sorbo de agua. No tome alcohol al menos 24 HORAS antes de la intervención y deje de fumar, si puede, desde este momento.

¿Qué pasa si me encuentro mal antes el día antes de la operación?

Si el malestar es leve, no se preocupe, simplemente recuerde que debe prevenir su estado de salud antes de la fecha prevista de la cirugía.

Si sufre una infección vías respiratorias altas “resfriado”, posibilidad de embarazo, crisis  de ansiedad, entre otras contacte con la secretaria del Servicio Quirúrgico correspondiente, de esta forma usted contribuirá de forma positiva para que su puesto en quirófano no se pierda y pueda ser ocupado por otro paciente.

En cuanto su estado transitorio de pérdida de salud se solucione se le operará, no tema,  “no perderá su lugar en la lista de espera quirúrgica”.

Para  cualquier otra consulta llame la numero del Hospital la Fe,  961244000.

¿Qué tipo de ropa llevo de llevar para la intervención?

Al venir al Hospital lleve ropa cómoda, y traiga unas zapatillas de estar por casa. No lleve joyas, ni objetos de valor, ni los deposite en las taquillas. Traer una moneda de 1 euro para el cierre de la taquilla de los vestuarios por ejemplo.

Para evitar posibles infecciones deberá ducharse por la mañana, se lavará el cabello y no usará maquillaje ni laca de uñas.

En la Unidad le serán retiradas las prótesis dentales, audífonos, gafas y lentillas antes de entrar a quirófano. El día anterior a la intervención y para determinadas intervenciones deberá rasurarse la zona operatoria, se le indicará.

¿Que hago cuando llego al hospital antes de mi operación?

El día de la intervención tiene que presentarse en la sala de espera de la UCSI previa obtencion del codigo identificativo que se dispensa con su SIP, en el quiosco automatico anexo ( primera planta, torre B, subiendo las escaleras mecánicas), en ayunas y acompañado por un adulto  responsable a la hora que se le indique.

Normalmente a las 8.00h si se opera por la mañana y a las 14.00 horas si se opera por la tarde (este horario puede estar sujeto a variaciones y su citación puede ser escalonada dependiendo del parte quirúrgico.  (Intentaremos que su espera preoperatoria sea la menor posible).

La pulsera identificativa se le facilitará en el mostrador de la UCSI o eventualmente en la misma unidad.

FAQS

¿Qué pasos seguirá mi hijo o hija el día de la cirugía?

Tanto si el niño o la niña  está ingresado en una habitación del hospital, como si ha venido de su domicilio y ha sido atendido en la unidad de cirugía sin ingreso (UCSI), acudirá acompañado de uno de sus familiares a la sala de acogida del bloque quirúrgico pediátrico.

Allí será recibido por el personal de enfermería y el anestesiólogo pediátrico responsable quien verificará sus datos y le administrará medicación en caso de ser necesario.

A continuación, será trasladado a quirófano donde será anestesiado y posteriormente intervenido quirúrgicamente. Una vez finalizado el procedimiento, será trasladado a la unidad de recuperación postanestésica pediátrica donde será vigilado hasta que se encuentre estable y completamente restablecido.

Será entonces, cuando el menor se trasladará de nuevo a su habitación previamente asignada o de nuevo a la unidad de cirugía sin ingreso acompañado de sus familiares

¿Cómo van a anestesiar a mi hijo o hija?

Con ocasión de una operación o reconocimiento pueden aplicarse distintos tipos de anestesia. Según el tipo de intervención, después de la evaluación del menor  y tras plantear las opciones más adecuadas, se tomará una decisión consensuada con los progenitores y el propio menor si la edad lo permite.

¿En qué consiste la visita a la consulta de anestesia?

El estado de salud del menor es fundamental a la hora de anestesiarlo. Por ello, el niño o la niña acudirán un día a la consulta de anestesiología acompañado de su padre/madre o tutor para realizarle una valoración previa a la cirugía o procedimiento. El personal médico anestesista le hará una serie de preguntas en dicha consulta. Resulta conveniente, en consecuencia, reflexionar con antelación sobre lo siguiente:

Preguntas para cada paciente:

  • - Enfermedades pasadas y actuales
  • - Alergias
  • - Medicamentos consumidos actualmente y en época reciente (el último mes)
  • -Anestesias anteriores y posibles complicaciones derivadas de éstas
  • - Familiares que hayan podido experimentar dificultades con la anestesia
  • -Tendencia aumentada al sangrado y dificultad en la cicatrización de heridas
  • -Dientes móviles
  • - Mareos en los desplazamientos (tendencia a marearse y vomitar, por ejemplo, al viajar en coche)

Preguntas adicionales para jóvenes:

  • -Consumo de tabaco
  • - Embarazo

No olvide en particular comunicar al personal responsable de la anestesia si el menor sufre o ha sufrido recientemente alguna afección de las vías respiratorias, como, por ejemplo, neumonía, bronquitis, laringitis, amigdalitis, etc. Estas patologías aumentan el riesgo de complicaciones durante la anestesia, pudiendo prolongar la estancia en el hospital o provocar el aplazamiento de la operación.

Tras dicho examen y una vez resueltas sus dudas de cara al procedimiento, se le entregará un consentimiento informado; documento que deberá firmar como autorización para administrarle la anestesia.

¿Porqué el ayuno es importante antes de una operación?

Es esencial para la seguridad del menor seguir las indicaciones específicas de ayuno facilitadas por el hospital. Ello se debe al posible riesgo de vómitos durante la anestesia, lo que puede originar complicaciones muy serias en las vías respiratorias.

¿Cómo y cuándo debo informar a mi hijo o hija?

La información es algo necesario y positivo para la niña y el niño que van a ser operados. Lógicamente, hay que adaptarla a su nivel madurativo, sus preguntas y a las inquietudes que manifiesta. El grado de comprensión de la información y por ello la manera de proporcionarla, está en función de su edad.

Hasta los 3 años de edad:

Como progenitor de un niño  o niña pequeños al que debe anestesiarse, probablemente sea la persona adulta la que sienta una mayor preocupación y angustia. Se trata de sentimientos totalmente normales, pero se ha de recordar que los bebés de hasta 4 ó 6 meses de edad suelen poder separarse fácilmente de sus progenitores y sentirse pese a todo protegidos con las personas que cuidan de ellos.

 Entre los 6-8 meses y los 2 años muchos niños y niñas  experimentan períodos de temor por los extraños, lo cual viene condicionado por su desarrollo. En  este tramo de edad basta con una explicación corta y sencilla sobre lo que va a ocurrir.

 Los menores de 3 años tienen una noción del tiempo incompleta, por lo que no debe informárseles con demasiada antelación. A los que están empezando a hablar puede comunicárselo un día antes o el mismo día.

3-6 años:

 Los niños y niñas  en edad preescolar viven en un mundo de fantasía y concepciones mágicas. Por tanto la información debe ser breve y sencilla. Ellos aprenden mediante juegos, por lo que debe otorgarse prioridad a este método de comunicación. En este sentido, recurrir a un juguete junto con un  “maletín de doctor” puede resultar de gran utilidad.

La noción del tiempo de los niños y niñas  en edad preescolar también es limitada. Así pues, la información debe distribuirse a lo largo de un número breve  de días, por ejemplo, una semana, ofreciendo información  más detallada  uno o dos días antes del tratamiento u operación.

6-12 años:

Los niños y niñas  en edad escolar empiezan a diferenciar entre imaginación y realidad y saben que pueden ponerse enfermos por problemas internos y no sólo por alguna circunstancia externa como un accidente.

Los menores de este grupo de edad pueden expresar sus sentimientos y son capaces de comprender el motivo y el efecto de una exploración médica. En comparación con los más pequeños muestran un mayor interés por lo que va a ocurrir. Debemos informarles a demanda según el contenido de sus preguntas.

 A esta edad los bocetos y dibujos sirven de instrumento para transmitir sus pensamientos y preocupaciones. Se aconseja informarles  una semana antes de la intervención.

Adolescencia:

 La adolescencia constituye un período de gran intensidad en la vida de las personas, lleno de importantes cambios físicos y psíquicos. Los adolescentes tienden a verse como el centro de todas las cosas. Suelen creer que nadie ha atravesado antes la misma situación o experimentado los mismos sentimientos.

El adolescente desea que se le considere casi como un adulto y quiere que le informen casi como tal. Por tanto, ya no se contentan con saber lo que va a ocurrir durante un determinado procedimiento o intervención, sino que les interesa el proceso en su integridad.

Debe animarse al adolescente a realizar preguntas y ha de incluírsele en las discusiones, planteamientos y decisiones. La información debe facilitársele con una antelación suficiente para las oportunas reflexiones y consideraciones. Advierta al adolescente sobre la posibilidad de anotar sus preguntas y dudas para llevarlas más tarde al hospital.